Desde hace casi una semana no he publicado ninguna entrada en el blog.
Pero no penséis que voy a cerrar la bitácora. Esto sólo ha sido un lapsus bitacorae, o en cristiano, unos días de relax al margen de mi actividad bloguera. Y como no hay mal que por bien no venga, parece que la pausa ha servido también para recuperar el ritmo normal del servidor de bitacoras.com que estuvo unas semanas bastante tocado. Ahora, funciona a toda máquina.
Este puente he estado con Wendy en Jaén, donde he compartido unos días estupendos con mi familia y unos amigos de Marbella que casi podrían ser mis segundos padres. Cristobal, Esperanza y Albita me han hecho sonreir mucho y sobre todo me han recordado que la vida está llena de pequeños momentos que hay que saber saborear. Prometemos que este verano le haremos una visitita. Además creo que mi padre va mejorando y tiene un excelente sentido del humor.
Ahora ya de nuevo en el trabajo donde me espera un proyecto duro pero ilusionante. También he decidido ponerme a régimen y empezar a hacer ejercicio. Para lo de la dieta Wendy me va a echar una manita y para el ejercicio he decidido recuperar una vieja afición perdida: la bicicleta de montaña.
Esta semana, espero comprarme una y empezar a pedalear por tierras celtas. Seguiremos informando.
Una pena que no hayamos podido coincidir por las tierras del Sur, pero bueno… ya habrá más ocasiones.
Me alegra verte así de bien, ánimo con el proyecto, eres un crack.
Un abrazo